Siete puñaladas asestaron a traición
llegando a los más profundo del corazón
y arrebatando la vida de un servidor:
una por amor, esa la que más dolió,
la segunda por dinero, no me sorprendió,
los bienes la tercera, me dejaron desnudo,
por mí bien fue la cuarta, excusa de sus actos ante amigos y vecinos,
con traiciones y engaños es la quinta, al creer en los seres queridos,
la sexta la de los devotos, traición urgida por los siervos de Dios
y séptima y ultima, las de mis hermanos que contra mí confabularon.
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