Amanece como cualquier día
pero no es igual que ayer
algo cambio y no fui yo,
¿el sol calienta más
o hace más frío quizás?,
no lo sé, miro por la venta
y espero hallar respuesta
pero todo permanece estático,
inamovible con el paso del tiempo.
Los pájaros cantan alegres
como cada día sin pedir permiso
o importarles sí molestan,
revoloteando por los árboles
de la acera,
¡que extraño!, pienso
y sigo como sí nada
enfrascado en aquello que hago
sin darle importancia.
Al fin y al cabo si algo cambia
que más da,
yo sigo igual a pesar
de ser un día diferente,
mirando adelante
y sin ver más allá de la frente.
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Invisible.