Tras el rojo amanecer
resurge un mundo verde,
de colores alegres
y bellos contrastes.
El cantar de las aves
armoniza valles y ciudades
arrancando los grises,
y pintando de colores
las vidas tristes.
Con paleta de mil colores,
se pincela los paisajes
y se dan colores,
a sentimientos alegres.
Las gentes felices
contagian a los tristes,
los alegres a los refunfuñones
siendo todos mejores.
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