Tras la lejanía
el visitar de la familia,
el encuentro por navidad
de emociones perdidas.
De tradiciones arraigadas
y aún no olvidadas,
por las manos inexpertas
no acostumbradas a cocinar.
Hechos a trabajar
esclavos de la modernidad,
inexpertos en la vida
hogareña y tradicional.
Prisioneros de la tecnología
no descansan ningún día,
todos tienen su propia vida
que se fuga sin ser vivida.
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